¿Cómo hacerse tiempo para divertirse durante la maternidad?
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Parece que, cuando una es madre, son muchos los obstáculos que nos impiden salir y divertirnos. Aquí tienes algunas de las quejas más habituales y algunas ideas para pensar un poco.
• No tengo tiempo. No necesitas un día entero, ni si-quiera medio día; con media hora puede ser suficiente para que te diviertas. Después de leer este libro, verás que, en parte, divertirse es ante todo una actitud o predisposición. Hasta podrías considerar la posibilidad de dar a algunas de las cosas que ya haces un carácter más divertido.
A fin de que puedas disponer de algo de tiempo, sería bueno que te plantearas la forma en que te organizas el día. ¿No hay «tiempos muertos» que quieras reorganizar para tener más tiempo libre? Otra alternativa es que contrates a alguien que te ayude con la casa, sobre todo si además de llevar la casa también trabajas.
Cookie
Cuando me puse a pensar en la forma en que ocupaba mi tiempo, me di cuenta de que tres o cuatro noches a la semana, después de acostar al bebé, me limitaba a apoltronarme en el sofá hasta que me entraba sueño tres horas más tarde. Aquello era un tiempo muerto porque, aunque no hacía nada, no me sentía renovada. Decidí que después de acostar al niño, una de las noches me tomaría una taza de té y me pondría a limpiar. Las tareas de la casa no me resultaban más agradables que antes, desde luego, pero lo cierto es que así dejaba un espacio de tiempo libre durante el día para poder salir y divertirme. Otra de las noches la pasaría tomando un agradable baño y otra invitaría a alguna amiga a casa o la pasaría leyendo.
Hannah
Me puse a evaluar lo que estaba haciendo. Trabajo casi a jornada completa, y además están las tareas domésticas y otras pequeñas cosas, como pagar las facturas, comprar, cuidar del jardín y dedicar un tiempo a mi marido y mi hijo. Mi programa habitual consistía en levantarme, dar el biberón al niño, ducharme, bañar al niño, dar de comer al niño y, con un poco de suerte, comer algo yo también, llevar al niño a la guardería, trabajar todo el día y luego lo mismo pero al revés, además de preparar la cena, lavar y planchar. Los fines de semana tenía más tiempo, así que me dedicaba al jardín, a lavar, planchar, comprar y hacer las tareas de casa. Buscar una persona para que viniera tres veces por semana a ayudarme con la casa y alguien que viniera cada quince días a ocuparse del jardín me permitió ir a un ritmo más moderado y empezar a gozar de la maternidad, además de dejarme algún tiempo para relajarme y disfrutar.
• Estoy demasiado cansada. El cansancio puede convertirse en una verdadera trampa para las madres, ya que nos hace sentir que nunca tenemos la suficiente energía para hacer las cosas. Sin embargo, divertirse y, sobre todo, hacer algo de ejercicio, puede incrementar tu nivel de energía. Incluso si se trata de un ejercicio moderado, las endorfinas que eso libere harán que te sientas bien y te ayudarán a dormir mejor.
• No tengo nadie con quien divertirme. No necesitas a nadie para divertirte. Además, a través de tu hijo entrarás en contacto un otras personas y actividades.
• Mi hijo se pone muy tonto cuando salimos. La mejor h u nia de conseguir que tu hijo se porte bien en público es practicar. Hay muchas cosas que puedes hacer para ayudarlo. Ante todo, asegúrate de que llevas provisiones para él: comida, algo para picar, algo de beber y juguetes. No esperes que tu hijo aprenda a distraerse solo tan pronto.
• Mi marido/madre desaprueban que pase fuera tanto tiempo. Por sorprendente que parezca, aún hay quien cree que el lugar de la madre está en la casa. Quizá convenga que te sientes con esa persona y le expliques lo mucho que os ayuda a ti y a tu hijo poder salir y entreteneros un poco. También debes recordar que no siempre puedes complacer a todo el mundo, que debes hacer lo que te apetezca a ti, no a los demás.
• No sé divertirme. Si hasta ahora tu vida ha sido tan ajetreada que no has tenido tiempo para divertirte, esta es una excelente oportunidad para que experimentes y aprendas a hacerlo. Hay infinidad de cosas que probar.
• No tengo ánimo para divertirme. Si te sientes abatida o estás atravesando una depresión posparto, salir a divertirte puede levantarte el ánimo y ayudarte a romper el círculo vicioso de la depresión.
• No puedo permitírmelo. Esta es la razón que dan la mayoría de las mujeres para no divertirse. Pero el caso es que hay muchísimas formas de divertirse sin dinero, o con muy poco.
Margot
Después de haber contado con un sueldo propio, me resultó bastante difícil limitar los gastos y me preocupaba por cada céntimo que gastaba. En realidad, no es que estuviéramos tan apurados, pero aun así yo sentía que tenía que andarme con cuidado. Tras barajar las diferentes posibilidades, vi que podía trabajar algunas horas a la semana, encontrar cosas que no costasen dinero y establecer un plan general para las finanzas de la casa, aparte de decidir si todas las cosas que estábamos pagando eran realmente necesarias o podíamos guardar algo para gastarlo en salidas. Hablé del asunto con mi marido y en nuestro presupuesto pudimos incluir una pequeña asignación semanal para «diversiones».
Si los obstáculos con los que te enfrentas son diferentes, debes barajar las diferentes alternativas. Eso significa que no hay que esperar a que las alternativas se te vayan ocurriendo, sino que tienes que dejar volar un poco tu imaginación. Aunque puedes hacer esto sola, funciona mejor cuando intervienen otras personas, porque es esa interacción lo que nos permite encontrar nuevas ideas. Una vez que tengas una lista, considera las que podrían serte de mayor utilidad con tus problemas.
Freeda
Tenía ganas de ir al cine con mayor frecuencia, pero, dada mi situación económica, no podía permitírmelo, ya que, aparte del cine, tenía que pagar a alguien para que cuidase de Taylor. Soy madre soltera y no tengo familiares que puedan ayudarme cerca de donde vivo. Se me ocurrieron las siguientes ideas: ir a las sesiones matinales para niños y llevarla conmigo; ponerme de acuerdo con una amiga para que cuidara a mi hija cuando yo saliera y yo cuidara a la suya cuando lo hiciera ella; tratar de economizar en otras cosas; pedir que me regalasen una noche de canguro por mi cumpleaños; visitar a mis parientes e ir a algún cine que hubiera cerca.
Seguramente encontrarás algún obstáculo para hacer lo que quieres cuando tú quieres, pero vale la pena que busques alternativas y arregles las cosas como mejor puedas.
• Para salir, tengo que organizar tantas cosas que no vale la pena. Muchas madres tienen verdaderos problemas para arreglarlo todo y salir de casa antes de mediodía. Hay tantas cosas que coger y tener a mano que puede llevarte bastante rato prepararlo todo y subir al coche, sobre todo si el bebé no deja de llorar o cada dos por tres se escapa gateando por la puerta. Las siguientes sugerencias están pensadas para ayudarte cuando te encuentres en esa situación:
— Considera la posibilidad de aplicar algunas de las normas organizativas que has utilizado en el pasado a esta tarea en particular. Piensa en lo que deseas conseguir, cuándo, cuáles son los obstáculos y cómo puedes superarlos. Por ejemplo, si siempre te olvidas de alguna cosa, ¿no podrías hacerte una lista y establecer una serie de objetos que siempre debes llevar en el bolso, de modo que nunca los olvides y al mismo tiempo no tengas que estar siempre pensando si te has acordado de todo?
— Si realizas actividades que requieren un material diferente, considera la posibilidad de tener varios bolsos: uno para los paseos, uno para la piscina y otro para cuando vas de visita. Aunque quizá esto implique un mayor gasto, te evitará mucho estrés. Por ejemplo, si guardas tu bolsa para la piscina en el lavadero (con su bote de champú, un par de pañales limpios y toallitas para el niño), podrás sacar la toalla y el bañador en cuanto llegues a casa y volver a ponerlos en la bolsa cuando estén secos. Tener todas las cosas que necesitas en un mismo sitio evitará que tengas que acordarte cada vez de todo y que tengas que ir de un lado a otro buscándolas.
— Ten siempre una bolsa con juguetes especiales en el coche.
— Quizá te resulte más fácil si no te impones unos horarios demasiado rígidos para hacer las cosas; pero tiene que haber unos límites, entre las 10 y las 10.30, por ejemplo. Será más fácil que hagas las cosas si no tienes la presión de seguir un horario.
— Si algún día tienes que estar a una hora determinada en algún sitio, una hora razonablemente temprana, sugerimos que lo prepares casi todo la noche anterior. Incluso si no tienes la costumbre de hacerlo, te ayudará a reducir considerablemente el estrés.
Aquí tienes algunas sugerencias:
- Prepara la bolsa la noche anterior.
- Reúne cualquier otra cosa que puedas necesitar.
- Si tienes que hacer algún recado por el camino, prepara una lista y calcula cuánto tiempo invertirás en cada uno.
- Si no conoces el sitio adonde vas, busca la calle en el mapa y mira si hay un aparcamiento cerca.
- Decide lo que os vais a poner el niño y tú la noche anterior y tenlo preparado, y, si es necesario, planchado.
- Deja que el niño duerma hasta el último momento, para que tengas tiempo de prepararte y de preparar las cosas antes de levantarlo.
- Si acuestas temprano a tu hijo, quizá sea bueno que lo dejes todo dispuesto la noche antes.
- Da de comer al niño y lávalo antes de vestirlo.
- No te vistas hasta el último momento o ponte encima alguna prenda que te proteja. Aunque las batas no son muy atractivas, van divinamente para
evitar las manchas en la ropa. - Si no te da tiempo a comer nada antes de irte, coge alguna pieza de fruta para comerla en el coche.
- Trata de no ponerte melodramática si se te hace tarde. Solo irás a donde puedas.
- Finalmente, debes aprender a ser flexible, porque habrá días en los que salir será demasiado complicado y será mejor que cambies tus planes. A veces es mejor quedarse en la cama.
- Recuerda que preparar a dos personas requiere más tiempo: haz planes realistas.
- Ponte unas pautas que sean razonables y que no acarreen demasiado estrés. ¿Es necesario que parezca que acabas de salir de las páginas de una revista de modas?
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Publicado en:Fertilidad y Embarazo
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